Marzo es un mes clave para trabajar la coeducación porque incluye el Día Internacional de la Mujer (8 de marzo), una fecha que invita a reflexionar sobre la igualdad de género y la coeducación. Es un momento ideal para fomentar valores de inclusión y diversidad en el aprendizaje, es por ello que proponemos:
- Frase del mes: «El deporte no es solo juego, es una plataforma para la igualdad.» – Alex Morgan (futbolista)
- Defensor/a de la igualdad: Megan Rapinoe es una futbolista estadounidense y activista reconocida por su lucha por la igualdad salarial en el deporte y los derechos LGBTQ+. Ha ganado múltiples títulos, incluyendo la Copa del Mundo Femenina en 2015 y 2019. Su valentía se hizo evidente cuando se unió a la demanda por igualdad salarial contra la Federación de Fútbol de EE. UU. También es conocida por su apoyo al movimiento Black Lives Matter y su defensa de la inclusión en el deporte, convirtiéndose en un modelo a seguir para muchos. Su compromiso la ha establecido como una figura influyente dentro y fuera del campo.
- Película: «A League of Their Own» (1992): Esta comedia-drama sigue a un equipo femenino de béisbol durante la Segunda Guerra Mundial, mostrando la lucha de las mujeres por ser reconocidas en un deporte dominado por hombres.

- Canción: «Fight Song» – Rachel Platten: Esta canción es un himno de empoderamiento que anima a las mujeres a luchar por sus sueños y mantenerse firmes.
- Lectura: «The Daring Book for Girls» de Andrea J. Buchanan y Miriam Peskowitz: Si bien no se centra exclusivamente en el deporte, este libro celebra la historia de las mujeres y niñas en diversas actividades, incluyendo el deporte, y fomenta la confianza y la igualdad.

- Sabías que… el primer equipo de fútbol femenino en EE. UU.: El primer equipo de fútbol femenino de EE. UU., llamado el «All-American Girls Professional Baseball League«, se formó en 1943 durante la Segunda Guerra Mundial, cuando los hombres estaban en el frente de batalla. Sin embargo, el fútbol femenino no ganó popularidad hasta mucho después. En 1991, EE. UU. organizó la primera Copa Mundial Femenina de la FIFA, donde el equipo estadounidense ganó el torneo, marcando un hito en la historia del fútbol femenino y ayudando a impulsar su desarrollo en el país y en todo el mundo.
