Rocío Cáiz, de 17 años, madre de un bebé de cuatro meses, ha sido asesinada y descuartizada por su exnovio en Estepa. La menor, de Martín de la Jara, acudió a la casa en donde convivía con su exnovio “por última vez”, y sí, fue por última vez. El asesino compró una motosierra días antes del atentado para descuartizar el cuerpo, que repartió en bolsas de basura por todo el pueblo. Aunque fue anteriormente maltratada, incluso con rotura de nariz, nunca denunció. Muchos creen que si no hay denuncia, no hay violencia de género ni por supuesto se puede llegar al asesinato.  Esto es patriarcado, y no sería tan fuerte ni tan peligroso si la sociedad creyera a las víctimas antes que a los verdugos. 

Encuentran restos de una menor donde buscaban a las niñas de Tenerife, Olivia y Anna, pero algunos todavía no creen que el llamado “padre”,  pudiera haberlas matado, porque “las quería tanto”. Esto es patriarcado, y no sería tan fuerte ni tan peligroso si la sociedad creyera a las víctimas antes que a los verdugos.

A Plácido Domingo le aplauden en Madrid como si no hubiera un mañana, como si él no tuviera un ayer, porque muchos creen que las veinte mujeres que acusaron al tenor eran unas busconas, él un señor. Un conocido períódico que  publica noticias falsas y con oscuros fines, sostiene que es falso que ese “señor” confesase” haber abusado sexualmente de varias mujeres, dejando, eso sí,  a la ministra de Igualdad como una ilusa y lianta. Esto es patriarcado, y no sería tan fuerte ni tan peligroso si la sociedad creyera a las víctimas antes que a los verdugos.

Diego el Cigala acusa a su expareja de haberlo denunciado por dinero, pero muchos creen que las mujeres ponemos denuncias falsas por oscuros motivos, aunque ya en 2004 fue condenado a una multa por haber proferido amenazas y expresiones machistas contra una azafata en un vuelo desde Madrid del que tuvo que ser desalojado. Esto es patriarcado, y no sería tan fuerte ni tan peligroso si la sociedad creyera a las víctimas antes que a los verdugos. 

Juana Rivas está encarcelada por evitar entregar a sus hijos a su maltratador. Aunque los vecinos y vecinas de Maracena, su ciudad natal, han pedido el indulto, muchos creen a su expareja, que se opone a dicho indulto en cualquiera de las modalidades que asegura que su concesión sería “un capricho ideológico de imprevisibles consecuencias”. Esto es patriarcado, y no sería tan fuerte ni tan peligroso si la sociedad creyera a las víctimas antes que a los verdugos. 

La mujer embarazada de 28 años asesinada el lunes 17 de mayo  junto a su hijo de siete años en Sa Pobla (Mallorca) presuntamente por su pareja, le había denunciado en dos ocasiones por malos tratos y fue incluida en el programa de protección para denunciantes de violencia machista. Pero aún así, los cuerpos sin vida de madre e hijo fueron hallados en el domicilio familiar. No se la creyó, ni se la protegió como debiera.

Esto es patriarcado, y no sería tan fuerte ni tan peligroso si la sociedad creyera a las víctimas antes que a los verdugos. 

La Violencia de Género incluye el maltrato físico, psicológico, social y económico; el cual se puede dar en cualquier ámbito y circunstancia de nuestras vidas.  La violencia de género es una violencia específica, que responde a un origen muy concreto: las desiguales relaciones entre hombres y mujeres que históricamente han reforzado el patriarcado. 

  • Las Naciones Unidas definen la violencia contra la mujer como “todo acto de violencia de género que resulte, o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada”. 
  • En nuestra Ley Orgánica 1/2004 de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, la violencia de género se define como la violencia que, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia. Por violencia, dicha ley considera todo acto de violencia física y psicológica, incluidas las agresiones a la libertad sexual, las amenazas, las coacciones o la privación arbitraria de libertad.

En España, desde que se tienen registros, en enero de 2003, hay 1096 víctimas mortales a manos de sus parejas o exparejas, según la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género  y 41 menores. Las más de mil mujeres asesinadas han dejado huérfanos a cerca de 800  menores. 

El patriarcado es un  término originalmente derivado de la palabra Patriarca, utilizado desde los años 70, hace referencia a una estructura de organización y dominación sexo-género en el que prevalece la autoridad y el poder de los hombres y lo masculino; mientras las mujeres son despojadas del ejercicio de libertades, derechos, poder económico, social o político.